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Tantas veces como reclamamos justicia y reinvindicamos nuestros derechos, tambien Dios tiene sus derechos que son deberes para con nosotros. Fue Jesucristo quien nos dijo: Dad a Dios lo que es de Dios, y al Cesar lo que es del Cesar. Pues tomemos nota y cumplamos lo que a Dios le corresponde que le demos: AMOR, ADORACIÓN, GRATITUD Y REPARACIÓN.



27 de enero de 2013

DEBÉIS INVOCAR AL SANTO ARCÁNGEL MIGUEL QUE ES EL TERROR DE LOS DEMONIOS Y VENCIÓ A SATANÁS



Alma Mía, no solo no te quiero negar la ayuda para las almas sino que además deseo que tengas cada día más interés en ello, porque los instrumentos debéis tener conciencia de lo importante que es lo que recibís y que sea adecuado a las almas, porque un dictado no adecuado puede desorientar más que orientar. Yo, Espíritu de Dios, os hablo.

Ser instrumento de Dios implica muchas cosas aparte de recibir. Hay que vivir una vida de castidad intensa, hay que vivir una vida de oración continua, hay que practicar los sacramentos y renunciar a las cosas del mundo, y sobre todo, a la televisión y espectáculos frívolos que para nada os sirven en vuestra santificación y que os pueden contaminar. Yo, Espíritu de Dios, os hablo.

Pero a vosotros instrumentos de Dios no os faltará Mi gracia, ni las gracias especiales que necesitáis, pero hijos, no pretendáis saber o conocer más de lo que el Cielo os quiera dar, centraros en vuestra misión y no os creáis profetas de otras misiones, solo sed instrumentos de la misión o asuntos que Dios os haya encomendado. Yo, Espíritu de Dios, os hablo.

Debéis estar muy unidos a la Santísima Virgen que tuvo una misión única y la cumplió en todo momento conforme a la voluntad de Dios. Debéis estar relacionados con vuestro Ángel de la Guarda que para eso os lo ha designado Dios, para que os ayude a caminar por la sendas adecuadas, esto va también para aquellas personas que no son instrumentos del Cielo pero que viven la vida cristiana y quieren andar por caminos rectos sin errar.

Debéis invocar al Santo Arcángel Miguel que es el terror de los demonios y que venció la batalla celestial contra Satanás y sus secuaces. Y sobre todo, instrumentos de Dios, debéis de invocarme a Mí en todo momento, para que Mi luz y gracia no os falte y para que la sepáis aprovechar  adecuadamente. Yo, Espíritu de Dios, os hablo y os instruyo. La paz de Dios a todo aquel que  leyendo estos mensajes los pone en práctica.