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Tantas veces como reclamamos justicia y reinvindicamos nuestros derechos, tambien Dios tiene sus derechos que son deberes para con nosotros. Fue Jesucristo quien nos dijo: Dad a Dios lo que es de Dios, y al Cesar lo que es del Cesar. Pues tomemos nota y cumplamos lo que a Dios le corresponde que le demos: AMOR, ADORACIÓN, GRATITUD Y REPARACIÓN.



21 de julio de 2014

NO ES IMPOSIBLE GANAR EL CIELO PORQUE MI MISERICORDIA SUPLE DONDE VOSOTROS NO ALCANZÁIS



Hijos Míos que aspiráis a vivir eternamente en el Cielo, nada deseo más que eso sea así, que todas las almas se salven y vengan a gozar eternamente de Su Dios y de Su Redentor. Nada desea más Mi Madre Santísima que es la mayor y mejor intercesora que tenéis. Y vosotros hijos Míos, también lo deseáis, pero os creéis que el Cielo se gana solo con desearlo. No hijos, no. El Cielo hay que ganárselo con obras de amor y de misericordia, y cumpliendo en cada instante la voluntad de Dios. Yo, Jesús, os hablo.

Porque deseaba ardientemente que todas os salvaseis, Yo, el Cristo, vine a la Tierra  a padecer y morir por vosotros, para abriros las puertas del Cielo y enseñaros con Mi doctrina las sendas por donde debéis caminar. Pero vosotros, hijos Míos, que poco hacéis de vuestra parte, por no decir nada. Pasáis la vida en una desidia espiritual total, sin esforzaros lo más mínimo para reconvertiros, ni siquiera Me lo pedís. Solo vivís los días con una expectativa del Cielo falsa, porque aquel que no pone nada de su parte, no se lo van a dar hecho. Yo, Jesús, os hablo.

Esperáis el Cielo sin hacer nada para ganarlo. Esas mismas normas os sirven en vuestra sociedad, porque el que no hace algo para merecer lo que se propone, no se lo van a dar hecho. Yo, Jesús, os hablo.

No es imposible ganar el Cielo, no hijos no, porque Mi misericordia es infinita y suple allá donde vosotros no alcanzáis, pero una cosa es que supla y otra es que os regale el gozo eterno, cuando a Mis bienaventurados y a Mi Santa Madre les costó tanto ganárselo. Que no os engañe la serpiente y os diga que Dios es tan bueno que todo lo pasa por alto, no hijos no. Que si vosotros mismos no pasáis por alto conductas malas y elimináis de vuestras empresas o amistades a personas que no se enmiendan porque son retorcidas y no quieren enmendarse, también en el Cielo tenemos unas normas y condiciones para que lo ganéis. La primera de ellas es que viváis en estado de gracia cumpliendo íntegramente los diez mandamientos, y mirad que digo diez y no nueve u ocho, LOS DIEZ. Yo, Jesús, os hablo.

Por tanto hijos, decidid un plan de vida espiritual y empezadlo con una buena confesión, soltando venenos y lastre de vuestras almas, y proponiéndoos no volver a pecar, que ya Mi gracia os ayudará si quitáis las ocasiones de pecar. Yo, Jesús, os hablo y os instruyo. Paz a todo aquel que leyendo este mensaje lo pone en práctica.