Anónimamente muchos
de vosotros seréis injuriados ante obispos y párrocos. Yo, Jesús, os hablo.
Pero hijos, no os
atemoricéis, no perdáis la paz, ni la calma, porque Yo también lo fui y no
pudieron Conmigo. Quieren hundir Mi Iglesia y lo hacen atacando a las piedras
vivas que la sostienen, pero nadie os hará más daño del que Yo quiera permitir.
No creáis que Me olvidaré de vosotros cuando todo suceda. Vosotros defendeos
con la verdad, sin miedos, ni falsedades alguna, y confiando plenamente en Mí.
Yo, Jesús, os hablo.
Yo daré luz a los
obispos y a Mis párrocos para que comprendan y vean las mentiras de Satanás,
pero muchos lo pasareis mal hasta que se aclare todo. Os lo repito de nuevo, no
perdáis la paz, ni la calma, repetid una y otra vez: Jesús, confío en Ti. Yo,
Jesús, os hablo.
Esas acusaciones
alcanzarán a muchos, hombres y mujeres, laicos y sacerdotes y hasta a obispos,
y a cristianos de todas las edades. Ya sabéis que la calumnia es una de las
armas que emplea Satanás, por eso, consagraos a Mi Santísima Madre y confiad
plenamente en Ella, que es también vuestra Madre. Yo, Jesús, os hablo.
No uséis la
venganza, ni el odio para defenderos. Imitadme a Mí que Soy manso y humilde de
Corazón. Sed pacíficos pero veraces, porque la verdad siempre vence, y si en
algo sois culpables de lo que os acusen, aclarad las cosas y admitid vuestra
culpabilidad, porque hijos, reconocer vuestras faltas sin tratar de excusaros,
ya os da cierta credibilidad. Pedid luz
a Mi Santo Espíritu y ayuda a vuestro Ángel Custodio y encomendaos a San José
que tan probado fue en su vida terrenal. El os ayudará eficazmente y no os
dejará en los días de prueba. Yo, Jesús, os hablo.
Estos mensajes debéis
leerlos sin especular, a modo de alertas, pero no temiendo nada malo, porque Yo
os aviso para que no os cojan las cosas de sorpresa y estéis fuertes en la
oración. Practicad los sacramentos con inmenso amor y en las debidas disposiciones,
y poned todo en las manos amorosas e inmaculadas de Mi Santa Madre. Yo, Jesús, os
hablo y os bendigo. Paz a todo aquel que leyendo este mensaje lo cree y lo pone
en práctica.