Hijos Míos
que estáis especulando sobre la dimisión
de Mi Papa, os pido que en vez de especular tanto, recéis más. Yo, Jesús, os
hablo.
No debéis
hacer conjeturas de una u otra clase, solo debéis estar preparados para las
batallas que vais a tener que librar, porque hijos, las profecías deben
cumplirse pero Yo estaré con vosotros hasta el final. Yo, Jesús, os hablo.
Rezad
hijos de Mi divino Corazón por los religiosos y religiosas, por el clero, por
la Jerarquía. Encomendad a Mi Santa Madre a todas las personas cuya profesión Soy
Yo y que Me eligieron para meta de sus vidas. Pero rezad también por los
católicos, aquellos cuya fe brilla en la oscuridad de las almas muertas y no temáis
nada si vivís unidos a Mí y a Mi Santa Madre, porque Yo os amo como ni vosotros
mismos podéis amaros. Yo, Jesús, os hablo.
Mi Santo
Padre (el Papa) está muy delicado de salud, basta con creáis esto aunque existieran otras razones de peso.
Cuando un Papa toma esa decisión es porque no tiene otra mejor. Yo no os voy a
decir las cosas claras en su totalidad,
pero los acontecimientos sucederán y comprenderéis muchas cosas que ahora las tenéis
veladas. Yo, Jesús, os hablo.
Vivid en
estado de gracia para que tengáis fuerza en las tribulaciones que padeceréis,
porque nadie estará exento de ellas, unos más otros menos, pero todos sufrirán
parte de Mi Pasión y después la gloria de Mi Resurrección. Debéis alegraros de
vivir en esta época en que el sufrimiento por Mi causa no os va a faltar.
Muchos de Mis bienaventurados hubieran querido vivir en esta época por la de gloria
que Me podéis dar y la de gracias inmensas que podéis recibir, todo en la
medida de vuestra fe, amor y entrega
a Mí. Ni el niño, ni el anciano se verán exentos de sufrir, pero cada cual
según sus fuerzas y limitaciones, Yo no Soy un tirano, Soy un Dios de amor, y
os vuelvo a repetir que os amo sin medida. Yo, Jesús, os hablo.
No
quiero librar a nadie del bien espiritual que padecer por Mí trae, así que
hijos, cuando os venga el dolor, el desaliento, coged Mi mano y decidme: Jesús, yo, confío en Ti, porque quien confíe
en su Dios, tiene aprobada la más importante asignatura de todas, las demás
están muy por debajo de ésta, ya que la confianza en Mí es consecuencia del
amor que Me tenéis. Yo, Jesús, os hablo y os instruyo. Os quiero hijos, no lo
olvidéis.